Estimados Miembros del Congreso y Secretaria Nielsen:
Como madres y personas que se preocupan profundamente por los niños, opinamos que es espantoso que nuestro gobierno haya separado a la fuerza a miles de niños más de sus padres de lo que se sabía previamente y que la cantidad exacta aún se desconozca porque el gobierno no llevó un control de las familias que estaban siendo separadas.
Estas crueles prácticas son un sorprendente fracaso moral de nuestro gobierno que traumatiza profundamente a niños que de por sí son vulnerables. La ansiedad y desconfianza que sienten los niños institucionalizados lejos de sus seres queridos pueden producir problemas mentales y físicos a largo plazo, particularmente en los niños pequeños que necesitan atención personalizada en sus años formativos.
Creemos que las familias deben estar unidas, que los niños merecen estar con sus familias fuera de centros de detención y que sus derechos deben ser protegidos.
Les pedimos que dejen de usar de inmediato el dinero de los contribuyentes para financiar la separación y detención familiar y que implementen un proceso de supervisión exhaustivo para:
Reunir a las familias ahora mismo. La administración debe dejar de separar a los niños de sus padres y reunir inmediatamente a los que han sido separados con sus familias.
Poner fin a la detención familiar. Los niños y familias merecen tener acceso al debido proceso, no un encarcelamiento indefinido. Los niños no deben estar enjaulados o recluidos en campamentos. Encarcelar a las familias no soluciona la separación familiar.
Dejar de “enjuiciar a todos”. La administración Trump debe dar marcha atrás a su política de “cero tolerancia” que creo la crisis que hizo que miles de niños fueran separados de sus padres.
Atentamente,